Querido amigo:
Hoy vamos a pensar cómo construir un mundo más humano...
¿Acaso el mundo actual no lo es? Todo depende de lo que entendamos por humano.
Como personas, en nosotros se equilibran el instinto animal y la razón. Lo instintivo se rige por un afán de supervivencia; lo racional, en cierta manera, también busca la supervivencia. La razón nos permite interaccionar, conocer, transformar, comprender, ... la Naturaleza (incluida nuestra propia naturaleza).
Una sociedad en exceso gobernada por instintos es una sociedad primitiva. Por el contrario, una sociedad dominada por la razón -encarnada en la Ley-, corre el riesgo de alejarse del ser humano.
Entonces ¿qué falta? ¿qué vincula a naturaleza y razón? Posiblemente, amigo mío, el amor. El amor como máxima expresión de la espiritualidad, entendida ésta como el nexo entre el ser animal y el ser racional que se conjuga en cada uno de nosotros.
Ahora, pensemos en una sociedad que armonice racionalmente lo primario o instintivo, fundada sobre una base espiritual. En nuestra sociedad primarán la solidaridad, la compasión, un destino común.... ¿y qué más? Pensemos, pensemos...
Un abrazo
martes, 8 de junio de 2010
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
1 comentarios:
Javi, ya sabes cómo pienso: el amor está en nuestra naturaleza, pero también la envidia y el afán de supervivencia. Ese afán, aunque tengamos todas nuestras necesidades básicas cubiertas, nos lleva a practicar la peor de las avaricias, y la avaricia infinita del ser humano, es la máquina que mueve nuestro mundo, nos guste o no. Pero es bueno que la máquina tenga un freno, que exista el contrapunto de los seres humanos que basan sus actos en el amor y no en el afán de sobrevivir, porque hasta el más avaro, sabe lo que es el amor y es capaz de sentir compasión. Si no fuera así, no exisíría una mínima conciencia de respeto e igualdad en la sociedad occidental soportada por unas leyes más justas. Un mundo humano en conflico, un mundo que lucha entre las dos esencias del ser humano: lo bueno contra lo malo; lo bueno dentro de lo malo y lo malo dentro de lo bueno, en equilibrio dinámico.
Publicar un comentario